Ahora ya hemos entendido lo que significa Industry 4.0. Si no, puede ver el primer videoblog que publiqué explicando que es este concepto. Éste fue el primero de una serie llamada "Industry 4.0 - Todo lo que quería saber" que hoy continúo centrándome en las principales tendencias que están impulsando esta revolución.
El primero punto en el que quería detenerme es EN la visión sistémica. Cada vez más, la industria está adoptando una visión sistémica en todo lo relacionado con el ciclo de vida del producto, incluida su definición, construcción y evolución. Esto se basa principalmente en una expresión bastante antigua, la ingeniería concurrente que surge ya a fines del siglo pasado y que, en esencia, no es más que un esfuerzo sistemático para diseñar nuestros productos de forma integrada o concurrente con el proceso y el proceso de fabricación.
En ese sentido, lo que estamos vislumbrando, cada vez con más fuerza, es una tendencia profunda hacia la “servicialización”. Esto significa generar un servicio encima de cada uno de los productos que generas como industria, intentando aplicar una visión y un interés hacía la generación a su vez de un sistema de sistemas.
Deja que me explique mejor. Vamos a verlo rápidamente en el esquema que te estoy enseñando en este momento. Lo que está sucediendo es que la industria está evolucionando desde el concepto tradicional de generar un solo producto, en este caso y como ejemplo, un tractor, hasta un nuevo paradigma donde pueden proporcionar más valor alrededor de esos productos individuales y convertirlos en productos inteligentes. ¿Cómo pueden hacer eso? Básicamente por la agregación de una serie de sensores que nos permitirán saber qué está sucediendo dentro y alrededor de ese tractor. Puedo entonces analizar en tiempo real lo que estás haciendo y, aprovechando la hiperconectividad de la que hablamos en la publicación anterior, conectarte al mundo exterior y a otros sistemas de TI. Puedo entonces hacer magia con análisis y gráficos más complejos, obteniendo hechos y nuevos conocimientos que antes desconocía.
Y con eso, puedo avanzar hasta alcanzar un sistema de producto. Por ejemplo, puedo avanzar hasta conseguir algo que haga posible una conexión entre el tractor y un tipo de sistema de administración de equipos agrícolas que le permita comprender, conectar e incluso controlar los sistemas de plantación con esta magia alrededor del tractor que he creado. Así, lo que la industria está persiguiendo en este momento es crear tanto valor como se pueda para encapsularlo en un portafolio de productos y servicios atractivos, una especie de sistema de sistemas.
¿Qué estamos diciendo con eso? Ahora, cuando pienso en el producto, visualizo todo el ciclo de vida del producto, toda la experiencia del cliente. Estoy pensando en cómo realmente hacer que mi producto tenga valor y sea diferente del resto de la competencia. ¿Cómo? Generando un ecosistema completo, toda una serie de sistemas conectados que, a partir de un solo tractor, pueden evolucionar para formar un sistema de gestión agrícola completo, como vemos en el esquema.
Esa es una de las tendencias más básicas que están ocurriendo ahora mismo en todas las industrias. El siguiente factor clave es la integración. Y eso es algo que está en todas partes. Estamos asistiendo al paso gradual de un formato de trabajo basado en celdas más o menos aisladas ya optimizadas, a un modelo nuevo y actual basado en procesos donde los flujos de datos y producción están completamente integrados.
Y los estamos automatizando para lograr mejores niveles de optimización incluso, lo que está causando cambios profundos en las relaciones de la Industria, tanto entre proveedores y consumidores como entre el hombre y la máquina. Con este cambio estamos obteniendo cosas que ya deseábamos años atrás, como conseguir un menores inventarios y trabajo en curso. Esto no es nada nuevo. Nada que hayamos inventado ayer. Estamos consiguiendo además mejores niveles competenciales de nuestros gerentes y un mayor grado de personalización en el flujo de producción, lo que hace posible satisfacer realmente la nueva demanda que nos piden los clientes.
Más allá de las tendencias me gustaría comentar una serie de temores en forma de cambios disruptivos que también están muy presentes en la industria. El primero es muy básico. Es la competencia
Existe una competencia feroz en la industria de hoy. ¿Cómo te lo puedo mostrar? Bueno, enseñando cuatro números de Apple y Google en comparación con la industria alemana global, que como sabréis es una de las industrias más reputadas del mundo y una de las más poderosas. Lo que vemos aquí es que las cifras de todos son muy similares, dándose el caso que en algunos indicadores la industria alemana está incluso por detrás de las grandes corporaciones ¿Qué queremos decir? Que cada vez de manera más evidente, las compañías tecnológicas nativas, las que tienen tecnología en su ADN, han adquirido un nivel de ventas y beneficios igual que el de la industria tradicional. Esa misma industria que necesita hacer un cambio radical que les permita lograr la misma competitividad que estos nuevos jugadores.
El segundo es un tema que creo les resultará familiar a todos, la transformación del trabajo. Eso es algo a tener en cuenta, principalmente porque sale a diario en los medios. El otro día, para exponer el caso, encontré este titular en la portada de La Vanguardia (un periódico de Barcelona), "seis empleos destruidos por cada robot". Justo como suena. E investigando un poco más, encontré este titular en Crónica Global, una página web de noticias en Internet. "Un estudio indica que casi 9 millones de empleos, casi el 50 por ciento del total, corren el riesgo de desaparecer debido a la llegada de las máquinas"
¿Qué estamos sintiendo ante estas noticias? Miedo. Existe el temor de perder el trabajo. La gente piensa que la fantástica industria 4.0 hará que pierda mi trabajo porque las máquinas lo harán mejor que yo. Y en cierto sentido es así. Encontré una página web de noticias de la BBC, la que te muestro ahora, en la que de una manera relativamente divertida cualquiera puede buscar su trabajo, o el que le gustaría obtener, para conocer el grado de automatización que pueda llegar a sufrir en el futuro. Vendría a ser la probabilidad de ser reemplazado por una máquina.
Te doy el ejemplo de los camareros. Al consultar está página me atrevo a daros una recomendación. No te dediques a ser camarero porque tienes un noventa por ciento de posibilidades de que en poco tiempo las máquinas te reemplacen ¿Y qué hay de los granjeros? Más o menos la misma situación. En el corto o medio plazo esta profesión podría ser reemplazada gradualmente por la adopción del tractor inteligente y conectado.
Para acabar, busqué por supuesto cómo iba a afectar esta transformación al tipo de trabajo que desempeño actualmente. Quería saber si, dedicándome a la industria del software, tenía que comenzar a preocuparme. Bueno. Puedo estar tranquilo porque tan solo hay un 1 por ciento de posibilidades de que mi rol actual sea reemplazado fácilmente por una máquina.
Lo que trato de decir con esta inquietante página web es que se avecina un cambio disruptivo. Hoy en día la sociedad está sufriendo un cambio gradual pero imparable en el tipo de trabajo que estamos generando. De esta manera, en este gráfico que te estoy enseñando publicado recientemente por el Walt Street Journal, se muestra de manera clara el auge del trabajador del conocimiento.
El periódico realizó una exhaustiva comparación entre diferentes tipos trabajos según su nivel de "rutina". Lo que arroja el estudio es que la estabilidad de los trabajos más rutinarios, aquellos representados en azul en el gráfico, ha sufrido mucho durante las últimas recesiones, estabilizándose en las primeras pero con una clara tendencia a la baja en las últimas ¿Por qué? Porque hoy ya nos estamos dando cuenta de que este tipo de trabajo rutinario se puede hacer cada vez más con robots o computadoras. La rápida evolución de la tecnología informática está haciendo posible un nivel de reemplazo difícil de prever diez años antes.
Por otro lado, cada vez hay un menor número de trabajos no rutinarios, aquellos que podríamos considerar cercanos a la artesanía cómo podrían ser fontaneros o electricistas. Son personas con una alta carga de trabajo manual que pueden subsistir perfectamente en el futuro, pero con un bajo nivel de demanda como se puede ver en el gráfico.
Lo más relevante del gráfico quizás es la importante demanda que gira en torno al concepto de trabajador del conocimiento. Ese es el tipo de trabajo que está contribuyendo con cierta creatividad a su trabajo, lo que hace cada vez más difícil que las máquinas lo reemplacen. Entonces, ¿qué está pasando realmente? Honestamente, hay un cambio en los perfiles de competencia. Un cambio que ya comenzó y se acelerará aún más con esta Industria 4.0. Esta nueva Industria creará nuevos empleos. Pero lamentablemente para hacerlo primero deberá destruir otros. El hecho crucial es que a la larga habrá nuevas oportunidades con nuevos trabajos que requerirán nuevas habilidades, lo que significa que vamos a tener que aprender cosas nuevas.
En este punto creo conveniente dejar otro parámetro clave en el proceso: la renta básica universal. Lo que va a suceder es que obviamente no todos van a conseguir un trabajo porque no va a haber tantos trabajos para todos. Vale la pena explorar entonces esta idea, tanto que probablemente uno de estos días dedicaré mis esfuerzos a hacer una publicación específicamente sobre ésta. Por el momento, te recomiendo buscar más información en la web.
Espero que hayas disfrutado del vídeo.
Adiós
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2 Comments
Siempre ha existido trabajo para todos, el problema es que no siempre estamos suficientemente capacitados para el trabajo que queremos y por ese motivo no encontramos y pensamos que no hay. La realidad es otra.
Yo, creo que en el futuro habrá mas trabajos de los que los hay en la actualidad y como lo acabas de mencionar, serán en otras áreas totalmente distintas a las que conocemos.
El problema es que seguimos creyendo que somos mano de obra cuando la realidad es otra, somos gente creativa y pensante; personas que inventaron esas maquinas para mejorarnos la vida, no para asustarnos por perder el trabajo. Debemos reinventarnos.
Siempre se han extinguido empleos y surgido otros, debemos de prepararnos y adaptarnos y sobre todo dejar de tenerle miedo a esta hermosa era digital en la que poco a poco estamos viviendo inmersos.
Me gusto mucho eso del «trabajador del conocimiento» cada día el mundo nos demanda estar más preparados.
Muchas gracias por el comentario Cristel. Me encanta tu punto de vista, claro y realista. Lástima que tanta gente no tenga esa percepción y espere tranquilamente en sus sillones a que el trabajo les caiga en los brazos. Un saludo